martes, 16 de junio de 2015

Presentación instalación T.F.G. Entre Luces y Susurros un espacio sensitivo. Inauguración: 18/06/15 19 H. en el Edificio de Bellas Artes de Teruel.

El cartel:


     La idea que inspira en este proyecto se haya en una parte de la obra de Francisco de Goya y Lucientes, especialmente en la titulada El sueño de la razón produce monstruos, cuyo pensamiento sigue gozando, a nuestro entender, de plena vigencia y actualidad. Estamos inmersos en una sociedad altamente tecnificada, mediática y consumista, que metafóricamente expresamos como "la oscuridad" también en nuestro proyecto artístico, pues entendemos que en ocasiones ésta olvida su base humanista comprometiendo la dignidad del ser humano, al que parece se le dirige a un no pensar en cuanto acontece y le afecta personal y socialmente también. 


Dibujo y grabado de F. de Goya. El sueño de la razón produce monstruos (1796-1797). M. del Prado.



     En este trabajo expositivo se reflexiona sobre la sombra y la luz, En la sombra intuimos que habitan seres que acechan al hombre, tal y como la representó Goya, mientras éste se relaja confiadamente en una especie de adormecimiento indolente relajando sus alertas.

       Una parte de nuestra sociedad "duerme" mientras en la penumbra de su sueño se desarrolla una gran actividad con sus propios intereses. 

     Es por esto que encendemos candiles que iluminen en la oscuridad, como pequeños faros en la noche, capaces de mostrar y guiar la dirección correcta para arribar hasta buen puerto, que sugerimos sea el de La Razón mostrada por René Descartes en el Discurso del Método como por ejemplo: Pienso, luego existo. Son muchas, otra sería: Vivir sin filosofar es, propiamente, como tener los ojos cerrados, sin querer abrirlos jamás...

     Nuestro deseo sería este precisamente, sugerir el abrir los ojos y los sentidos a través de la luz del conocimiento y de la razón, ir en busca de la verdad, la propia e intranferible, la nuestra, en lugar de lo que nos ofrecen regalada... aparentemente.

     Hemos intentado generar un espacio sensitivo cargado de energías positivas y constructivas, un lugar, un hábitat, donde al ser humano también le cabe una responsabilidad, pudiendo y debiendo actuar consecuente y responsablemente como individuo social.

    Esto es artivismo.